El Partido Popular dará la batalla institucional, política y judicial para que los cordobeses tengan los mismos derechos y las mismas oportunidades que el resto de españoles.

Así lo ha expresado ante los periodistas el presidente del PP cordobés, Adolfo Molina, que ha asistido al foro Frente a la amnistía, igualdad que se ha celebrado en la tarde de hoy en el Rectorado de la Universidad de Córdoba y en el que han intervenido el consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública, José Antonio Nieto, el alcalde de Córdoba, José María Bellido, y el magistrado jubilado Félix Degayón.

Molina ha destacado que celebrar este foro «es casi obligado para tratar lo que está significando la amnistía que se va a llevar a cabo, lo que Pedro Sánchez ha firmado con un fugado de España para seguir siendo el presidente del Gobierno». «Vamos a seguir dando la batalla, y lo vamos a hacer desde las instituciones, la calle, los parlamentos, el Senado y los ayuntamientos, haciéndolo de una manera sosegada y moderada, como hacemos en el PP, pero no dando por hecho que, como ya hay Gobierno de Sánchez, este debate ha pasado y que no pasa nada», ha afirmado.

Para el presidente del PP cordobés es muy grave el ataque producido al Estado de Derecho, atacando a uno de sus pilares básicos, como es el Poder Judicial, y ha recordado que el 1 de octubre de 2017 «se atacó y se cometieron delitos que fueron juzgados luego por tribunales independientes y que ahora por siete votos se ha decidido que hay que hacer un borrón y cuenta nueva a aquello, provocando algo que no queremos, que la igualdad de todos los españoles se vea atacada y por ello que los cordobeses nos veamos perjudicados».

“Si los ciudadanos de otros territorios por el simple hecho de vivir allí van a tener beneficios y ventajas frente a los que vivimos en Córdoba, desde el PP no vamos a dejar de alzar la voz y de denunciarlo por mucho que haya Gobierno», ha afirmado Molina, y añade, “aunque Pedro Sánchez vaya a seguir sin escuchar a la calle y a los ciudadanos, nosotros estamos en la obligación de ofrecer la alternativa, con el PP y el presidente Núñez Feijóo, debatiendo de manera sosegada, moderada, escuchando a todos y ofreciendo la alternativa que más pronto que tarde será el Gobierno de todos los españoles».

Por su parte, José Antonio Nieto, que era secretario de Estado de Seguridad cuando se produjo el referéndum ilegal en Cataluña el 1 de octubre de 2017, ha lamentado que «en este momento la separación de poderes ‘de facto’ ha sucumbido al envite de Pedro Sánchez y de los nacionalismos y ha hecho que la sociedad española tenga dificultades para entender qué significa dicha separación y lo bueno que tiene la independencia judicial.

Para Nieto, ahora todos hablamos con más o menos conocimiento de lo que significa la amnistía, pero lo que justifica o permite que haya amnistía es el final de la independencia judicial y el ataque definitivo a la separación de poderes que se produce en este momento. «Es un disparate lo que está ocurriendo con el gobierno de los jueces y con la autonomía del Poder Judicial. Hemos arrasado con el Poder Judicial, hemos marcado a unos jueces con una cruz de derechas y otros de izquierda y hemos hecho que poco a poco la sociedad vaya interpretando en función de qué mayoría es la que apoya o no una sentencia, si a uno le gusta o no le gusta», ha afirmado.

En este sentido, para José Antonio Nieto hay una debilidad profunda en la democracia por esa ‘mala praxis’, que tenemos que cambiar. “Ahora muchos españoles entienden por qué el PP se ha resistido a entrar en el juego que quería el PSOE, porque el PSOE no quería renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), no quería elegir a los mejores jueces para gobernar el Consejo, sino que quería soldados que cumplieran las órdenes que le diera el presidente del Gobierno cada vez que hubiera algo delicado, como ahora la amnistía».

«Por eso, la amnistía, que es un gran problema, es una consecuencia de haber acabado con la independencia judicial, porque si existiera la independencia judicial, Pedro Sánchez no se hubiera atrevido a plantear la amnistía, ni a hacer una propuesta tan descalabrada, tan absurda y contraria a la Constitución como es la amnistía», ha dicho.

Frente a esto ha defendido que debemos intentar hacer doctrina, tratando de sensibilizar a la población y formar democráticamente, no rindiéndonos, y llegando hasta el último rincón a decirle a cada ciudadano lo importante que es que los jueces sean independientes, que no se sometan al poder del Gobierno, que no se sometan a la mayoría parlamentaria y que hagan sentencias en función de lo que significa la Ley y poner por encima de cualquier otra cosa la igualdad entre ciudadanos. «Que no por ser delincuentes de una determinada ideología se pueda eximir de su responsabilidad y a los delincuentes que lo son de otra les caiga todo el peso de la Ley», ha comentado, para añadir que «eso es acabar con la democracia y con la base sobre la que se apoya todo el Estado de Derecho en un país como España».

El alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha destacado que hay un malestar expresado en la calle de forma democrática y muy digna, como este mismo fin de semana se ha visto en Madrid, en una manifestación de cientos de miles de personas, ya que hay una gran parte de la sociedad española, mayoritaria, que se siente ahora mismo excluida, apartada de la convivencia y del consenso constitucional que nos ha regido en los últimos años, y que lo expresa claramente.

Bellido ha reprochado que se utiliza la amnistía, de dudosa constitucionalidad, simplemente para alcanzar la Presidencia del Gobierno, porque hasta el 22 de julio todo el mundo la negaba y a partir del 23 era posible. Así mismo se cuestiona el papel del Poder Judicial, recogido en un documento, que pone en duda y sospecha si los jueces han hecho una utilización política de los juzgados, de sus procedimientos, para influir en las decisiones políticas y en la voluntad política del conjunto de los españoles.

“Se está quebrando la igualdad que nos habíamos dado hasta ahora todos los españoles, que se está fomentando una desigualdad en el derecho y en el trato de los territorios», ha afirmado y ha advertido del «mercadeo al que se asiste hoy en España, donde a cambio de los votos para conseguir la Presidencia del Gobierno y un apoyo, directamente hay delitos que se quieren borrar, que eso es lo que hace la amnistía». «No es algo que, más allá de las discusiones de la legalidad, políticamente sea ni digno ni aceptable, y que efectivamente estamos hablando, como ha dicho Feijóo, de corrupción política, porque es un mercadeo de votos a cambio de amnistía».