El Partido Popular de Córdoba se suma a las acciones de ámbito nacional para pedir el cese inmediato del ministro de Consumo Alberto Garzón por sus ataques a la ganadería y al sector cárnico. Así lo ha manifestado el diputado nacional del PP cordobés Andrés Lorite.
Según Lorite, no podemos consentir más ataques y agravios de este ministro hacia un sector básico para la economía en la provincia de Córdoba, en Andalucía y España, que da sustento a muchas familias, que fija la población al territorio y que ha garantizado productos alimenticios de máxima calidad en los peores momentos de esta pandemia.
El Partido Popular presentará mociones en los ayuntamientos, la Diputación provincial y el Parlamento andaluz reclamando la rectificación inmediata de las declaraciones de Garzón y su cese por sus reiterados ataques a uno de los sectores productivos más importantes de la economía de la provincia.
Según el Informe Anual de la Industria Alimentaria Española Periodo 2020-2021, publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, la industria cárnica española es la tercera en cuanto a número de empresas que lo integran: 3.641 empresas, el 11,9% del total de empresas que conforman la Industria Alimentaria Española. El 67% de esas empresas tienen menos de 10 trabajadores y el 92,7% no alcanza los 50 empleados. “Esta industria está formada predominantemente por pequeñas explotaciones ganaderas de tipo familiar que ayudan a crear empleo y riqueza, y lo que es más importante a fijar población en el mundo rural”, explica Lorite.
En 2020 aportó casi 9.000 millones de euros de exportaciones a la balanza comercial de España contribuyendo a reducir el tradicional déficit comercial de nuestro país. “Si hablamos de eficiencia, sostenibilidad y respeto al medio ambiente y al bienestar animal, la producción ganadera de carne representa únicamente el 5,8% del total de emisiones de Gases de Efecto Invernadero a nivel mundial; el 80% de las cuales se producen en países en vías de desarrollo”.
Como prueba de que la industria cárnica española está firmemente comprometida en la defensa del bienestar animal, la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (ANICE)- la mayoritaria en el sector- adoptó en 2019 el acuerdo de instalar cámaras de video-vigilancia en mataderos, con objeto de supervisar el correcto cumplimiento de las condiciones de bienestar animal en los establecimientos de sacrificio.
Este acuerdo se tradujo en una solicitud formal, en octubre de 2019, a la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN), para el desarrollo de la legislación correspondiente.
Además, este sector cumple con toda la regulación relativa al bienestar animal y seguridad y calidad alimentaria elaborada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, el competente en la materia y que traspone las directivas que sobre estos aspectos se elaboran en la Unión Europea.
Frente a estos datos, el ministro de Consumo ha afirmado en una entrevista en el periódico británico The Guardian, que España exportaba carne de mala calidad procedente de animales maltratados (“…they export this poor quality meat from these ill-treated animals”).
“Si atendemos a los datos publicados por el propio Gobierno, estas declaraciones no tienen una base de veracidad y demuestran o bien la rotunda ignorancia de este ministro, o bien sectarismo o ambas cosas a la vez”, afirma Lorite.
El diputado cordobés ha recordado que no es la primera vez que Alberto Garzón ataca a una de las industrias alimentarias más importantes de Córdoba y de España, y con ello desprestigiar a un sector que lleva años adaptándose a los nuevos estándares de sostenibilidad ambientes, bienestar animal y calidad alimentaria, que da trabajo a cientos de miles de españoles y es una herramienta fundamental para luchar contra la despoblación.
El Gobierno lleva tres años atacando permanentemente al sector primario con el consentimiento de Sánchez: recortes en el PAC (5.000 millones de euros menos), subidas de impuestos al azúcar, al gasóleo, a la energía; prohibición de caza del lobo; anulación de inversiones en nuevos regadíos y planteamientos contra el aprovechamiento del agua; ataques a sectores estratégicos como el vino, las frutas o la carne; la reforma laboral prohibiendo los contratos de temporeros; acusaciones de esclavismo e insalubridad; la falta de fondos europeos (solo el 0’75% del total) son algunos ejemplos. “Este Gobierno no puede poner en riesgo a un sector del que depende casi el 12% el PIB nacional”, dice el diputado cordobés.
Por todo ello, desde el Partido Popular exigimos al presidente del Gobierno la rectificación inmediata de las declaraciones realizadas por el ministro de Consumo y su cese por los reiterados ataques al sector cárnico, uno de los sectores productivos más pujantes de nuestro país que lleva años mejorando sus procesos para garantizar la más alta calidad alimentaria y el bienestar animal.
Además, exigimos al ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, el cordobés Luis Planas, que desmienta con datos y de forma inmediata las afirmaciones del ministro Garzón, y que ponga en marcha una campaña nacional e internacional de defensa y apoyo al sector ganadero cárnico y las medidas necesarias para que dicho sector avance en sostenibilidad.
“No podemos aceptar la nueva espantada de Pedro Sánchez; no se puede decir que el Gobierno se desmarca de las declaraciones de uno de los miembros de ese Consejo de Ministros, los ministros lo son en todo momento y más aún cuando hablan en entrevistas con repercusión internacional”, afirma Lorite y añade, “el señor Garzón debe asumir responsabilidades, más aún cuando su negligencia perjudica a más de dos millones y medio de ciudadanos trabajadores y honrados; a un ministro no se le desautoriza, se le cesa y Sánchez está tardando en hacerlo”.
Desde el Partido Popular queremos reconocer el gran trabajo realizado por los miles de ganaderos españoles así como de los veterinarios e ingenieros agrónomos para hacer que el sector ganadero cárnico se adaptará a las nuevas exigencias, regulatorias y sociales, en materia medio ambiental, de bienestar animal y calidad y seguridad alimentaria alcanzando los máximos estándares de calidad en dichas materias.