El presidente del Partido Popular de Córdoba José Antonio Nieto ha anunciado que vuelve a confiar la campaña electoral de las Generales del 26J al secretario general Adolfo Molina, y ha abogado por hacer balance del primer año de gobierno del tripartito en la capital cordobesa.

Tras una reunión con el comité de dirección, Nieto ha valorado la pésima labor del PSOE en los últimos cuatro meses, donde en lugar de hacer posible un Gobierno estable con la gran coalición de los partidos mayoritarios, “optó por la opción irresponsable firmando un acuerdo con Ciudadanos que no servía para nada, y amagando un pacto con Podemos que tampoco llegaría a ningún sitio”.

En la ciudad de Córdoba conocemos las consecuencias de un pacto de radicales que están sufriendo todos los cordobeses día a día, y desde el Partido Popular vamos a hacer todo lo posible por impedir que un caso similar se repita en el futuro Gobierno de España”, afirma.

Nieto ha afirmado que la campaña electoral del 26J será austera, pegada al terreno y a los problemas de los ciudadanos, “pero no a problemas artificiales que algunos quieren crear”. Será una campaña cuerpo a cuerpo de los candidatos para luchar contra el hastío y el cansancio de la sociedad a base de ilusión y de trabajo.

España se la juega el próximo 26J”, ha afirmado, por lo que apela al voto útil y al voto inteligente para que nuestro país salga del bloqueo.

En breves fechas el PP cordobés elevará al Comité Electoral Nacional la propuesta de las candidaturas tanto al Congreso de los Diputados como al Senado, y la intención es repetir las candidaturas que tan buenos resultado dieron el 20D, mejorando aún más algunos aspectos. “El reto es pasar de uno a tres senadores y sobre todo que Córdoba sea una provincia importante en España, para que se siga generando empleo, crecimiento económico y resolviendo los problemas históricos de nuestra provincia”, ha mantenido Nieto.

Así mismo, el presidente del PP cordobés ha afirmado que en esta campaña electoral apelamos a la experiencia vivida durante el último año en el Ayuntamiento de la capital cordobesa, para que los ciudadanos hagan balance de lo sucedido y elijan entre un gobierno del caos para España, o un Gobierno más serio, más responsable y más productivo para nuestro país.